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Latinoamérica en Austria a través del cine
Por Carolina Rojas
Revela: Rafael Donnadío, de México, nos cuenta sobre su experiencia en Austria como promotor cultural y sobre algunos de sus proyectos. Rafael, cuéntanos cuál es tu labor aquí en Austria como gestor cultural, y qué es Latinidade.
Rafael: bueno yo podría definir el trabajo que hago hace ya varias décadas, como un intento de establecer comunicación entre las culturas de España, Portugal y Latinoamérica con Austria. Hace 3 años he agrupado todas estas actividades bajo el nombre de Latinidade, que fue el título que escogí para las dos últimas ediciones del Festival de Cine Latinoamericano, que llevé a cabo en la década de los 90 en Austria. Actualmente, bajo el nombre de Latinidade Foro Cultural, he seguido desarrollando diversas actividades como exposiciones, ciclos de cine, celebraciones comunitarias, presentaciones de libros, entre otros.
Revela: sería interesante escuchar un poco más sobre los festivales de cine, ¿qué experiencias había en Austria con el cine Latinoamericano y cómo fue acogida tu propuesta?
Rafael: Los Festivales de Cine los llevé a cabo a partir de 1991 durante 7 años. Esta idea surgió a raíz de que en 1988 se celebró una vez más el aniversario de la Protesta de México en contra de la Anexión de Austria por la Alemania Nazi y hubo varios eventos dedicados a México. En aquel entonces se me ocurrió programar algunas películas mexicanas en el Votivkino, y tuvo tanto éxito que pensé que sería interesante hacer un Festival de Cine Latinoamericano, lo cual hasta ese momento no se había realizado en Austria.
Fue un proceso que llevó tiempo: fui por ejemplo a México a ver las diferentes escuelas de cine y me encantó lo que estaban haciendo los egresados. Era un momento en el que estaban saliendo los primeros cineastas profesionales en México de todas las ramas; la producción, la dirección, cámara etc., ya que hasta ese momento los grandes cineastas se habían adiestrado de manera autodidacta, aunque como se sabe, México siempre tuvo una gran tradición en el cine.
La primera edición del Festival la nombré Jornadas de Cine Latinoamericano 1991, para que diera la impresión de que se hacía cada año, y sin pensar que realmente iba a tener tanto éxito, ya que fue muy complicado. Era una época en la que todavía se manejaban las cajas, de unos 30 kilos con los 3 a 5 rollos de celuloide, así que más de la mitad del presupuesto se fue en el transporte desde Latinoamérica u otras ciudades de Europa.
El aquel entonces, en el cine Filmhaus Stöbergasse, que ya no funciona como tal, el encargado de su programación, que es ahora el actual director del Filmcasino, fue el único atrevido que se lanzó a esta aventura que a todo el mundo le parecía descabellada. Los demás cines de Viena me decían “a quién le va a interesar ir a ver unas películas desconocidas, de directores desconocidos, de un cine desconocido, eso va a ser un fracaso.” Y Hans König, que tengo que nombrar porque es un verdadero pionero y “mecenas” del cine latinoamericano en Austria, fue el único que lacónicamente dijo “bueno, intentémoslo”. Y fue un gran éxito, tuvimos aproximadamente 16 películas de diferentes países, aunque los dos países que eran realmente un imán para el público eran Cuba y Brasil. Duró algo así como una semana y se realizó en las ciudades de Viena y Graz.
A raíz del éxito que tuvo, me contactaron de la diócesis de Graz, porque iban a hacer con motivo de 1992 un pequeño ciclo de cine latinoamericano, que le iban a llamar «KinoLatino». Yo les presenté una propuesta de curaduría para ese proyecto que pretendía presentar una visión de la cosmogonía, el descubrimiento, la colonización y el presente y futuro de América Latina. Luego de una preselección de unas 100 películas, llegamos a las 20 escogidas que se presentaron en orden cronológico de la temática, reflejando así la historia de América Latina. Este festival se presentó en Viena, Salzburgo, Graz, Dortmund, Linz, Innsbruck, Klagenfurt, así como en varias pequeños pueblos de Austria.
Revela: En el programa de la primera edición del Festival hay un texto del conocido poeta y escritor mexicano José Emilio Pacheco. ¿Cómo se da esta colaboración?
Rafael: José Emilio Pacheco había sido invitado a dar un ciclo de conferencias sobre literatura mexicana en Viena. Yo tuve la oportunidad de hablar con él, al encontrármelo en un café y aunque eso es otra historia, puedo decir que era una persona afable y con grandes conocimientos, anécdotas sobre la cultura latinoamericana. Le comenté que estaba preparando el Festival y él me propuso escribir un texto que sirviera de introducción en el programa del festival. Luego de un par de meses recibí un fax donde venía su texto escrito a mano. Este fax, lamentablemente, con el paso del tiempo, se extravió. A ese texto él lo tituló “La edad de la tierra”, nombre que yo había escogido para el festival, que es una película impresionante de Glauber Rocha, de Brasil. En su texto José Emilio Pacheco habla de su visión de cómo se convirtió La Tierra en el planeta que conocemos y cómo eso a su vez dio origen a Latinoamérica y a su vez al cine. Así que tuvimos la gran y maravillosa oportunidad de contar con un texto inédito de este autor que posteriormente recibió el Premio Cervantes de Literatura.
La siguiente edición se llamó “Utopía América”, que hace alusión a la polémica de si el descubrimiento de América era algo digno de lamentar o de celebrar. En esta ocasión contamos con un texto del cineasta argentino Fernando Birri. Este festival se realizó en todas las ciudades de Austria.
Revela: Qué pasó con este festival luego de sus 7 ediciones.
Rafael: Luego del Festival, cuya última edición se la dediqué a México, me dediqué a hacer ciclos de cine; cine mexicano, cine sobre migración, un cineclub latinoamericano, un festival en colaboración con las embajadas iberoamericanas, etc. Hace 3 años decidí retomar la idea, dándole un giro más adecuado a nuestra época, promocionado únicamente a través de redes sociales, y la idea fue hacer un» Festival In Progres», llamado Latin Film Lounge, que consistía en la proyección de una película de estreno en Austria, una vez al mes, y teníamos un Dj que ponía música y había comida latinoamericana, es decir todo un evento, para trata de contra restar la pérdida de la cultura de ir al cine. Se llevó a cabo en el Filmcasino y tuvo mucho éxito, fue planeado para un año, pero se llevó a cabo un año y medio. Adicionalmente, para implementar mi concepto de «promoción cinematográfica sustentable», algunas de las películas fueron adquiridas por la empresa Polyfilm, del Filmcasino, para su posterior exhibición regular en cartelera en cines de Austria.
Revela: y ¿en qué proyecto se encuentra trabajando Latinidade actualmente?
Rafael: Latinidade tiene un concepto de la promoción cultural que no es vertical, sino totalmente horizontal y diagonal, porque desde el principio ha sido para nosotros importante hacer enlaces, conjuntar intereses, recursos, esfuerzos, infraestructuras, entidades, iniciativas, recursos humanos, para poder llevar acabo eventos que de otra forma serían más difíciles de hacer. Quien esté interesado nos encuentra o bien bajo nuestra página en Facebook Latinidade Kulturforum, o a través de la página Das Mexikanische Totenfest in Österreich, también en Facebook, o a través del correo electrónico latkultur@gmail.com.
Actualmente lo que tenemos “en puerta” es la siguiente celebración de la Fiesta mexicana del Día de Muertos (das mexikanische Totenfest in Österreich) a principios de noviembre, que llevé a cabo por 15 años, cuando me ocupaba de la Sección Cultural de la Embajada de México y desde hace 3 años, de manera independiente, en el Weltmuseum, el museo de antropología de Viena, en el Hofburg, y hemos tenido un gran éxito que se refleja en el número de visitantes. El año pasado alcanzamos más de 2000 visitantes, incluyendo austriacos, la comunidad mexicana y otras comunidades latinoamericanas. Este evento se llevará a cabo también este año, próximamente podemos darles más detalles, pero puedo asegurar que como siempre estará cargado de mucha alegría y colores. Como cada año, incluirá la celebración de la presencia de nuestros queridos muertos con el ritual, procesión y altar tradicionales, además de danza, música, comida mexicana y mucho más.
Revela: luego de toda tu experiencia en Austria en el campo cultural, ¿cómo crees que es el recibimiento de lo latino?, ¿cómo ha recibido el público austriaco festividades como el Festival de cine latinoamericano o el Totenfest?
Rafael: Retomando los 35 años que llevo en Austria, recuerdo que cuando llegué no existía lo que ahora se llama, aunque a veces parezca muy incipiente, la “escena latina”.
Hay que tomar en cuenta 2 cosas. Por un lado, es un hecho que el porcentaje de las comunidades latinoamericanas en Austria no es tan grande si lo comparamos con otras como las de Turquía o la antigua Yugoslavia; somos realmente muy pocos en comparación. Sin embargo nuestra presencia, yo me atrevería a decir incluso, e influencia en la vida diaria en Austria es muy fuerte, y tan fuerte que ya no es solo un fenómeno social y cultural sino incluso económico, porque el interés por lo latino ha crecido tanto, que genera puestos de trabajo porque han ido surgiendo muchos proyectos, instituciones, restaurante, bares, escuelas de idiomas, agencias de viajes, escuelas de baile, discotecas, etc., ect.
Ahora bien, aquí hay que diferenciar entre en interés por Latinoamérica y su cultura y la moda de lo latino. Aunque a mucha gente no le gusta oírlo, yo personalmente pienso que este auge de los latinoamericano, nos guste o no, es un producto derivado de la propagación de ciertos elementos, especialmente en el campo de la música, a través de los medio masivos de comunicación y de la influencia Norteamericana. Me refiero a que por ejemplo si Shakira no hubiera empezado a cantar en inglés,no sería la figura que es ahora a nivel mundial, o como Jennifer López que se «vende» o presenta como mujer latina a través del cine. No les quito de ninguna manera su valor a ninguna de ambas figuras, pero es un hecho que estamos influenciados, enajenado por todo lo que maneja la industria del entretenimiento norteamericano. Eso llega a Europa y de alguna forma abre el camino para el interés en lo latino. Incluso dentro de Latinoamérica, por ejemplo hace 30 años en México recuerdo que hablar de bachata era algo que las clases acomodadas consideraban como «música para gente de medio pelo” y esto ha cambiado porque los videos de Aventura se transmiten por ejemplo en canales de la televisión norteamericanos etc.
Pero eso también tiene una consecuencia, y es que hay mucha gente que identifica, o confunde lo latinoamericano con el sabor de vida latinoamericano, el entretenimiento, los cocteles, las clases de salsa, la figura cliché del latinlover, etc. Claro que muchos Latinoamericano asumen también con gusto ese rol, y piensan que otro tipo de cosas no se les podría ofrecer a la gente porque no les va a interesar, se tiene temor de ofrecer las cosas tal como son, por ejemplo en la comida. Y yo he tenido muchas, cómo llamarlo, tertulias polémicas con gente que provee u organiza eventos o actividades, en el sentido de que lo que no sea de entretenimiento no le va a interesar al público austriaco, pero aquí hemos hablado de dos temas que demuestran todo lo contrario, como es el cine latinoamericano y el día de muertos.
Revela: es decir que sí hay un interés real de lo que es la cultura latinoamericana, más allá del entretenimiento
Rafael: sí, y creo que nos vendría bien a todos los Latinoamericanos confiar más en el poder, en la fascinación, el magnetismo y la fuerza creativa de nuestra propia cultura en todas sus expresiones.
Revela: muchas gracias Rafael y estaremos pendientes de todas las actividades de Latinidade para compartirlas con nuestros lectores.
[:de]Latinoamérica en Austria a través del cine
Por Carolina Rojas
Revela: Estamos con Rafael Donnadío, de México, quien nos va a contar sobre su experiencia en Austria como promotor cultural y sobre algunos de sus proyectos. Rafael, cuéntanos cuál es tu labor aquí en Austria como gestor cultural, y qué es Latinidade.
Rafael: bueno yo podría definir el trabajo que hago hace ya varias décadas, como un intento de establecer comunicación entre las culturas de España, Portugal y Latinoamérica con Austria. Hace 3 años he agrupado todas estas actividades bajo el nombre de Latinidade, que fue el título que escogí para las dos últimas ediciones del Festival de Cine Latinoamericano, que llevé a cabo en la década de los 90 en Austria. Actualmente, bajo el nombre de Latinidade Foro Cultural, he seguido desarrollando diversas actividades como exposiciones, ciclos de cine, celebraciones comunitarias, presentaciones de libros, entre otros.
Revela: sería interesante escuchar un poco más sobre los festivales de cine, ¿qué experiencias había en Austria con el cine Latinoamericano y cómo fue acogida tu propuesta?
Rafael: Los Festivales de Cine los llevé a cabo a partir de 1991 durante 7 años. Esta idea surgió a raíz de que en 1988 se celebró una vez más el aniversario de la Protesta de México en contra de la Anexión de Austria por la Alemania Nazi y hubo varios eventos dedicados a México. En aquel entonces se me ocurrió programar algunas películas mexicanas en el Votivkino, y tuvo tanto éxito que pensé que sería interesante hacer un Festival de Cine Latinoamericano, lo cual hasta ese momento no se había realizado en Austria.
Fue un proceso que llevó tiempo: fui por ejemplo a México a ver las diferentes escuelas de cine y me encantó lo que estaban haciendo los egresados. Era un momento en el que estaban saliendo los primeros cineastas profesionales en México de todas las ramas; la producción, la dirección, cámara etc., ya que hasta ese momento los grandes cineastas se habían adiestrado de manera autodidacta, aunque como se sabe, México siempre tuvo una gran tradición en el cine.
La primera edición del Festival la nombré Jornadas de Cine Latinoamericano 1991, para que diera la impresión de que se hacía cada año, y sin pensar que realmente iba a tener tanto éxito, ya que fue muy complicado. Era una época en la que todavía se manejaban las cajas, de unos 30 kilos con los 3 a 5 rollos de celuloide, así que más de la mitad del presupuesto se fue en el transporte desde Latinoamérica u otras ciudades de Europa.
El aquel entonces, en el cine Filmhaus Stöbergasse, que ya no funciona como tal, el encargado de su programación, que es ahora el actual director del Filmcasino, fue el único atrevido que se lanzó a esta aventura que a todo el mundo le parecía descabellada. Los demás cines de Viena me decían “a quién le va a interesar ir a ver unas películas desconocidas, de directores desconocidos, de un cine desconocido, eso va a ser un fracaso.” Y Hans König, que tengo que nombrar porque es un verdadero pionero y “mecenas” del cine latinoamericano en Austria, fue el único que lacónicamente dijo “bueno, intentémoslo”. Y fue un gran éxito, tuvimos aproximadamente 16 películas de diferentes países, aunque los dos países que eran realmente un imán para el público eran Cuba y Brasil. Duró algo así como una semana y se realizó en las ciudades de Viena y Graz.
A raíz del éxito que tuvo, me contactaron de la diócesis de Graz, porque iban a hacer con motivo de 1992 un pequeño ciclo de cine latinoamericano, que le iban a llamar «KinoLatino». Yo les presenté una propuesta de curaduría para ese proyecto que pretendía presentar una visión de la cosmogonía, el descubrimiento, la colonización y el presente y futuro de América Latina. Luego de una preselección de unas 100 películas, llegamos a las 20 escogidas que se presentaron en orden cronológico de la temática, reflejando así la historia de América Latina. Este festival se presentó en Viena, Salzburgo, Graz, Dortmund, Linz, Innsbruck, Klagenfurt, así como en varias pequeños pueblos de Austria.
Revela: En el programa de la primera edición del Festival hay un texto del conocido poeta y escritor mexicano José Emilio Pacheco. ¿Cómo se da esta colaboración?
Rafael: José Emilio Pacheco había sido invitado a dar un ciclo de conferencias sobre literatura mexicana en Viena. Yo tuve la oportunidad de hablar con él, al encontrármelo en un café y aunque eso es otra historia, puedo decir que era una persona afable y con grandes conocimientos, anécdotas sobre la cultura latinoamericana. Le comenté que estaba preparando el Festival y él me propuso escribir un texto que sirviera de introducción en el programa del festival. Luego de un par de meses recibí un fax donde venía su texto escrito a mano. Este fax, lamentablemente, con el paso del tiempo, se extravió. A ese texto él lo tituló “La edad de la tierra”, nombre que yo había escogido para el festival, que es una película impresionante de Glauber Rocha, de Brasil. En su texto José Emilio Pacheco habla de su visión de cómo se convirtió La Tierra en el planeta que conocemos y cómo eso a su vez dio origen a Latinoamérica y a su vez al cine. Así que tuvimos la gran y maravillosa oportunidad de contar con un texto inédito de este autor que posteriormente recibió el Premio Cervantes de Literatura.
La siguiente edición se llamó “Utopía América”, que hace alusión a la polémica de si el descubrimiento de América era algo digno de lamentar o de celebrar. En esta ocasión contamos con un texto del cineasta argentino Fernando Birri. Este festival se realizó en todas las ciudades de Austria.
Revela: Qué pasó con este festival luego de sus 7 ediciones.
Rafael: Luego del Festival, cuya última edición se la dediqué a México, me dediqué a hacer ciclos de cine; cine mexicano, cine sobre migración, un cineclub latinoamericano, un festival en colaboración con las embajadas iberoamericanas, etc. Hace 3 años decidí retomar la idea, dándole un giro más adecuado a nuestra época, promocionado únicamente a través de redes sociales, y la idea fue hacer un» Festival In Progres», llamado Latin Film Lounge, que consistía en la proyección de una película de estreno en Austria, una vez al mes, y teníamos un Dj que ponía música y había comida latinoamericana, es decir todo un evento, para trata de contra restar la pérdida de la cultura de ir al cine. Se llevó a cabo en el Filmcasino y tuvo mucho éxito, fue planeado para un año, pero se llevó a cabo un año y medio. Adicionalmente, para implementar mi concepto de «promoción cinematográfica sustentable», algunas de las películas fueron adquiridas por la empresa Polyfilm, del Filmcasino, para su posterior exhibición regular en cartelera en cines de Austria.
Revela: y ¿en qué proyecto se encuentra trabajando Latinidade actualmente?
Rafael: Latinidade tiene un concepto de la promoción cultural que no es vertical, sino totalmente horizontal y diagonal, porque desde el principio ha sido para nosotros importante hacer enlaces, conjuntar intereses, recursos, esfuerzos, infraestructuras, entidades, iniciativas, recursos humanos, para poder llevar acabo eventos que de otra forma serían más difíciles de hacer. Quien esté interesado nos encuentra o bien bajo nuestra página en Facebook Latinidade Kulturforum, o a través de la página Das Mexikanische Totenfest in Österreich, también en Facebook, o a través del correo electrónico latkultur@gmail.com.
Actualmente lo que tenemos “en puerta” es la siguiente celebración de la Fiesta mexicana del Día de Muertos (das mexikanische Totenfest in Österreich) a principios de noviembre, que llevé a cabo por 15 años, cuando me ocupaba de la Sección Cultural de la Embajada de México y desde hace 3 años, de manera independiente, en el Weltmuseum, el museo de antropología de Viena, en el Hofburg, y hemos tenido un gran éxito que se refleja en el número de visitantes. El año pasado alcanzamos más de 2000 visitantes, incluyendo austriacos, la comunidad mexicana y otras comunidades latinoamericanas. Este evento se llevará a cabo también este año, próximamente podemos darles más detalles, pero puedo asegurar que como siempre estará cargado de mucha alegría y colores. Como cada año, incluirá la celebración de la presencia de nuestros queridos muertos con el ritual, procesión y altar tradicionales, además de danza, música, comida mexicana y mucho más.
Revela: luego de toda tu experiencia en Austria en el campo cultural, ¿cómo crees que es el recibiendo de lo latino?, ¿cómo ha recibido el público austriaco festividades como el Festival de cine latinoamericano o el Totenfest?
Rafael: Retomando los 35 años que llevo en Austria, recuerdo que cuando llegué no existía lo que ahora se llama, aunque a veces parezca muy incipiente, la “escena latina”.
Hay que tomar en cuenta 2 cosas. Por un lado, es un hecho que el porcentaje de las comunidades latinoamericanas en Austria no es tan grande si lo comparamos con otras como las de Turquía o la antigua Yugoslavia; somos realmente muy pocos en comparación. Sin embargo nuestra presencia, yo me atrevería a decir incluso, e influencia en la vida diaria en Austria es muy fuerte, y tan fuerte que ya no es solo un fenómeno social y cultural sino incluso económico, porque el interés por lo latino ha crecido tanto, que genera puestos de trabajo porque han ido surgiendo muchos proyectos, instituciones, restaurante, bares, escuelas de idiomas, agencias de viajes, escuelas de baile, discotecas, etc., ect.
Ahora bien, aquí hay que diferenciar entre en interés por Latinoamérica y su cultura y la moda de lo latino. Aunque a mucha gente no le gusta oírlo, yo personalmente pienso que este auge de los latinoamericano, nos guste o no, es un producto derivado de la propagación de ciertos elementos, especialmente en el campo de la música, a través de los medio masivos de comunicación y de la influencia Norteamericana. Me refiero a que por ejemplo si Shakira no hubiera empezado a cantar en inglés,no sería la figura que es ahora a nivel mundial, o como Jennifer López que se «vende» o presenta como mujer latina a través del cine. No les quito de ninguna manera su valor a ninguna de ambas figuras, pero es un hecho que estamos influenciados, enajenado por todo lo que maneja la industria del entretenimiento norteamericano. Eso llega a Europa y de alguna forma abre el camino para el interés en lo latino. Incluso dentro de Latinoamérica, por ejemplo hace 30 años en México recuerdo que hablar de bachata era algo que las clases acomodadas consideraban como «música para gente de medio pelo” y esto ha cambiado porque los videos de Aventura se transmiten por ejemplo en canales de la televisión norteamericanos etc.
Pero eso también tiene una consecuencia, y es que hay mucha gente que identifica, o confunde lo latinoamericano con el sabor de vida latinoamericano, el entretenimiento, los cocteles, las clases de salsa, la figura cliché del latinlover, etc. Claro que muchos Latinoamericano asumen también con gusto ese rol, y piensan que otro tipo de cosas no se les podría ofrecer a la gente porque no les va a interesar, se tiene temor de ofrecer las cosas tal como son, por ejemplo en la comida. Y yo he tenido muchas, cómo llamarlo, tertulias polémicas con gente que provee u organiza eventos o actividades, en el sentido de que lo que no sea de entretenimiento no le va a interesar al público austriaco, pero aquí hemos hablado de dos temas que demuestran todo lo contrario, como es el cine latinoamericano y el día de muertos.
Revela: es decir que sí hay un interés real de lo que es la cultura latinoamericana, más allá del entretenimiento
Rafael: sí, y creo que nos vendría bien a todos los Latinoamericanos confiar más en el poder, en la fascinación, el magnetismo y la fuerza creativa de nuestra propia cultura en todas sus expresiones.
Revela: muchas gracias Rafael y estaremos pendientes de todas las actividades de Latinidade para compartirlas con nuestros lectores.[:]